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Donald Trump celebró su cumpleaños haciendo alarde el sábado del poder de su ejército con un pomposo desfile militar. Al mismo tiempo se llevaron a cabo protestas en todo el país para denunciar el autoritarismo del mandatario republicano. Una congresista demócrata fue asesinada en Minnesota.
Dos países se afrontaron el sábado dejando visible la gran polarización en Estados Unidos. Por un lado, el presidente Donald Trump celebró su cumpleaños presidiendo un ostentoso desfile militar en Washington. Por el otro, los adversarios del mandatario protagonizaron multitudinarias protestas en todo el país, a grito de “No king”, un mensaje dirigido directamente a Trump, a quien consideran un líder autoritario.
Casi 7.000 militares recorrieron el centro de Washington en el desfile más grande de este tipo desde 1991 bajo un cielo nublado, pero sin las tormentas eléctricas que predecían los meteorólogos. En el palco, acompañado por su esposa Melania, el presidente republicano hizo el saludo militar mientras los tanques rugían, sobrevolados por aviones.
“¡USA! ¡USA!”, gritaron los asistentes cuando el que ha sido el 45º y 47º comandante en jefe del ejército subió al palco para conmemorar el 250 aniversario de la creación de las fuerzas armadas.
Una salva de 21 cañonazos, seguida del himno estadounidense, marcó el comienzo de un espectáculo castrense que costará hasta 45 millones de dólares, según las autoridades.
Durante casi dos horas los tanques resonaron, los paracaidistas descendieron de los aviones y los helicópteros volaron a baja altura, mientras el público retrataba el momento con sus teléfonos móviles.
La muchedumbre observó en silencio el paso de los soldados con uniformes de distintas guerras. De vez en cuando, se escuchaba “¡Gracias, Ejército!” entre vítores y gritos de alegría.
Pero en ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Chicago o Houston, cientos de miles de personas se opusieron a las políticas de Trump en la mayor movilización en el país desde que el magnate regresó a la presidencia en enero pasado.
Los organizadores la bautizaron “Sin reyes” en un claro mensaje contra Trump. Su objetivo: “rechazar el autoritarismo, la política de los multimillonarios y la militarización” de la democracia.
En Nueva York, decenas de miles de personas, vestidas con impermeables y con paraguas de colores, recorrieron la Quinta Avenida bajo la lluvia al son de tambores, campanas y cánticos: “¡Ey, ey, oh, oh, Donald Trump tiene que irse!”.
En Los Ángeles, escenario de días de protestas contra las redadas migratorias, la policía comenzó a desalojar a las personas en medio de la confusión.
Policías a caballo hicieron retroceder a la multitud y las fuerzas de seguridad usaron gases lacrimógenos y granadas aturdidoras horas antes de un toque de queda a las 8pm, hora local.
La jornada se vio ensombrecida por varios enfrentamientos entre manifestantes y las autoridades, pero también por dos tragedias.
En Minnesota (norte) un hombre mató a la congresista estatal demócrata Melissa Hortman y a su esposo Mark, mientras que el senador John Hoffman, también demócrata, y su esposa Yvette resultaron heridos, declaró el gobernador Tim Walz, que calificó el episodio de “acto de violencia política selectiva”.
Con AFP
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